6 buenas razones científicas para ver la película PASAJEROS

AMAMOS las películas que nos hacen sentir, y más las que nos hacen pensar: en física; tal es el caso de Passengers (2016). Con menos de dos horas de ver el film, escribo cinco puntos de buena ciencia mostrada en el film. Cuidado con los SPOILERS, ya estas advertido.

¿De qué va la peli?

Pasajeros es una historia de amor, sin ser comedia, donde un Robinson Crusoe futurístico (interpretado por Chris Pratt), se cansa de esperar a su Viernes, por lo que propicia que aparezca su amada Dominga (encarnada por Jennifer Lawrence). La idea es que la vida en la Tierra es sensacional, pero en otros planetas es mejor. De modo que la gente se puede embarcar en viajes de 120 años en hibernación para llegar a una tierra prometida. La Nave Avalon, lleva a 5 000 personas en tal travesía; pero algo sale mal: despertando a un pasajero, a menos de la mitad del viaje. Aunque el hombre cuenta con todas las necesidades básicas cubiertas (alimento, alojamiento, ropa, etc.), le falta algo, necesita un propósito, necesita compañía. La soledad le carcome, de modo que decide arrastrar a alguien más a compartir su destino antisocial: despertando a otro pasajero.

La crítica especializada se lamenta que la obra pierda fácilmente el debate sobre el sentido de la vida en soledad y las bases éticas alrededor de propiciar cambios radicales en la vida de la gente, en pos de la complementariedad personal. Pero a todos les encanta el diseño artístico y la fotografía.

Veamos 6 momentos de física en la cinta Pasajeros.

1) Lágrimas en el espacio

Uno de los protagonistas se encuentra en medio de espacio interestelar, acongojado, una lágrima corre por sus mejillas. En principio, es correcta la representación del llanto. Aunque el líquido parece caer, nunca se separa del rostro. Efectivamente, los astronautas pueden llorar en el espacio, pero por la tensión superficial y la ausencia de fuerzas externas, las lágrimas permanecen alrededor del ojo y pegadas a la piel. Chris Hadfield, astronauta canadiense, desde la Estación Espacial Internacional, muestra en video cómo se comportan las lágrimas ingrávidas, no se separan en esferoides acuoso-salados.

2) Viaje interestelar

Le sienta bien a la película que todavía no se hayan descubierto agujeros de gusanos o atajos para viajar entre las estrellas. El guion se fundamenta en narrar un desplazamiento que dura más que la vida media de una persona. Otros films como Pandórum (2009), Alien (1979)  y sus muchas secuelas han aprovechado la idea de un sueño profundo que permite prolongar la vida durante una travesía centenaria. Hoy, la nave más rápida de la NASA, la Juno, viaja a 265,000 km/h, muy lejos de la velocidad de la luz. En el mundo futuro de la película, la nave Avalon alcanza  la mitad de la velocidad de la luz, es decir viaja a un planeta a 60 años-luz de distancia. A falta de la velocidad taquionica, la hibernación es una alternativa para el viaje interestelar. De hecho, el sueño profundo es un tema de investigación serio en el medio medico y de viajes largos

Con todo, mucho del paisaje espacial, me parece raro, pues a esa velocidad de c/2 la contracción longitudinal es de aprox. 87%, suficiente para observar cambios en el panorama, pero tal vez es una minucia en una obra de arte.

3) Gravedad artificial

La gravedad artificial por rotación es un lugar-común en el cine. Ya la película 2001: odisea del espacio (1968) muestra el concepto y la nave Avalon lo usa en un diseño precioso. Argumentando una gran longitud, desplegada en una menor área efectiva, Avalon cuenta con hélices rotantes. Según el diseñador de la película Guy Hendriz Dyas: “Las aspas rotan cada 80 segundos para producir un 1 g”, así que ya puedes hacer tus cuentas del diámetro de la nave. La representación es correcta, más aún, es viable en escenarios reales.

4) Centro de masa y conservación ímpetu

En una escena, un protagonista se ve en el espacio exterior, y tiene que lanzar un objeto masivo para que su cuerpo se mueva en sentido contrario. La representación es correcta y es la base mecánico-clásica del movimiento en naves a propulsión a chorro. Como son los globos que inflas y dejas ir de tus manos, y también de los cohetes reales que van al espacio. Este detalle físico me gusto.

5) Impulso por fuerza gravitacional

En una escena se ve a la nave pasar cerca de una estrella, Arcturus. Los escritores querían un pretexto para poner un detalle romántico, el impulso gravitacional les dio la oportunidad.  El escritor del guión, Jon Spaihtsadmite que el acercamiento a la estrella no brinda un aumento de la velocidad considerable para la nave. De hecho, la escena es rara por la cercania entre la estrella y la frágil Avalon. Pero digamos que es otra minucia.

6) Nadar en un burbuja acuosa ingrávida. 

Jennifer Lawrence realiza una escena que será parte de debates más detallados. Nadar dentro de una masa de agua, a microgravedad. La escena es compleja, tiene ciertos problemas por como se comporta la fuerza de Coriolis. Más allá de la dinámica, me hace pensar en el principio de Arquímedes y la falta de gravedad, creo que esta bien representado. En futuros posts abundaré sobre el tema que ha sido más criticado por los geeks.

Para cerrar

Estos son algunos temas científicos que capte de  la cinta. Seguramente otros críticos encontraran más y mejores tópicos, como los escudos contra-colisiones, espero que estas líneas sirvan de base para tales contribuciones. Lo que es seguro es que este film ha puesto atención a los errores de sus predecesores tempranos, que han aparecido en menos de dos años: Gravity (2013), Interestelar (2014) y El marciano (2015).

El año 2016 cierra con un film de ciencia de ciencia ficción que debes ver. Pues te da un buen pretexto para la plática geek durante la fiesta (LoL) o bien para que comiences un proyecto para impresionar a tu profesora de ciencias. En todo caso, ¿las películas son un buen pretexto para preguntarse si el comportamiento de la naturaleza está bien representado en la obra de arte?


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